miércoles, 12 de agosto de 2009

Despechado

Te fuiste al cine con él. Ni se te ocurrió respetar la ilusión que sembraste el día anterior en mí cuando me enviaste ese mensaje de texto culpando al mundo de tu desgracia. Recurriste a mí como a la última carta de tu baraja, variada, extensa y muy cariñosa baraja.

Parece que olvidaste que tuvimos algo hace seis meses ¿Qué cosa? Si, posiblemente hoy vuelvo a figurar como tu mejor amigo, posiblemente ya olvidaste las palabras que te dije cuando nos dimos cuenta que las cosas no funcionaban como pareja: “Puta madre ¿Cómo le hago? sé que algún día encontraras a alguien y no podré aguantarlo. Siempre te voy a querer y espero que no lo olvides” Así fue como nos mandamos a la mierda en ese entonces, sin imaginar que semanas después me llamarías para reanudar la amistad que se había interrumpido cuando osé pensar que yo podía hacerte sentir como una mujer. Grave error. Ser tu amigo pesa, jode, apesta, golpea, daña, emociona, excita, promueve el llanto, da ganas de no soltarte nunca después de cada abrazo, comerme a besos tus manos cada vez que me tocas, cuando miras mis labios siento que todo se detiene en esos ojos y me intimidas a pronunciar palabra alguna, de nada sirve ahora, estoy seguro, de nada.

Si pues, era raro pensar que después de un mensaje enviado el domingo por la madrugada (1 a.m.) contándome que yo para ti soy muy importante y especial, cambiaría en menos de veinticuatro horas porque el pendejo que te dañó -probablemente el domingo en la tarde- te llamaría un día después para pedirte disculpas e invitarte al cine. Magnifico plan. Aunque, quizá en su estrategia no estaba que el cojudo del mejor amigo de su enamorada seria tentado por la misma cuando quien sabe que idiotez hiciste para que ella intente olvidarte. Ganaste, ella no iba a resistirse a tus encantos de hombre sexy arrepentido. Yo en cambio; y aun sin conocerte, te dejaría ganar la batalla. Provecho campeón, te llevas mis sueños e ilusiones como oferta del combo.

Resumamos esto. Estoy despechado pero con justa razón. Acabaste con mi sueño todo la noche que duró el domingo. Me ilusionaste en ese momento, quizá por la hora, quizá por el día, o simplemente porque eras tú. Que iba a importar el regalo que te hice la semana pasada, o el libro que te obsequié con la firma de tu autor favorito, tú lo que quieres es un hombre que te haga feliz en todo el sentido de la palabra, lastimosamente, al ser mejor amigo, no postulo. Debí escuchar más atentamente a mi pata el wachiman: “No pues compadrito ¿estas enamorado? No me jodas, a esa edad yo solo tenía mujeres para tirar, enamorarse trae muchos problemas; no comes, no cachas y pierdes plata. Aprovecha que a esa edad el pájaro esta como nuevo.” Sabio dicho popular. Pero yo no te quiero para tirar pues, yo simplemente te quiero y si pudiera te llevaría virgen al matrimonio, claro, si es que aun lo estas (debe ser por eso que estaba clarita la frase “no comes, no cachas y pierdes plata”).

Tal vez deba terminar con esto de una vez por todas y empezar a olvidarte por todas las perradas que me has hecho, pero la simple idea de saber que no lo haces a propósito me devuelve el alma al cuerpo. Créeme, estas perdonada. Tú quieres mentir y yo quiero ser engañado, somos la pareja perfecta.

No sé qué carajos hago hablándole a una computadora a estas horas de la noche, no mereces tanto, ya van dos amanecidas en menos de tres días. ¿Me recompensaras algún día por esto? Vamos, ¿no te incomoda en lo más mínimo engañar a tu enamorado con tu mejor amigo? ¿No tendrás alguna fantasía perversa o algún morbo? Creo que la hora me está haciendo alucinar. Tú estás feliz con tu enamorado y yo deseo a ocultas tener aunque sea la parte más drogada de ti.
Perdóname, son simplemente arranques de este tu amigo enamorado. Te quiero, no lo olvides, aun que quizá lo vuelvas a hacer.

- Pobre Luis, le tocó la misma que a mí:

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Men si que estas despechado, sigue escribiendo.

Ricardo

Julio García Gonzales dijo...

Repito lo del otro. Sigue escribiendo. Escribes bastante bien.

Paolo dijo...

Wow demasiado esta entrada... que joda es el amor no?? como dice el guachi a veces es tan facil...yo lo he hecho...se podria decir q he vivido como un cazador prehistorico...pero de que te sirve llevas presas a casa si al final llega el momento en que te sientes solo y vacio... lamentablemente el amor es una enfermedad que todos queremos padecer y nunca encontrar la cura por mas que la necesitemos.

Radamanthys dijo...

Arriba la estupides, que porcierto la gente lo llama Amor.

Ayrton Vargas

Publicar un comentario

 

©2009 Palabras Dmentes | by TNB